Uso rudo en México

México es uno de los países (si no el que más) que tiene más cobertura de gas LP en el mundo. Más del 80% de la población mexicana tiene acceso al gas LP y la evolución de la misma se ha ido modificando.

Cuando se inició la operación de abastecer el sector doméstico, de contaban con tanques (cilindros) de 45 y 30 kilogramos de gas LP. Después con el tiempo se instalaron tanques estacionarios y se introdujeron los tanques de 20 kg. La tendencia de su uso tuvo su pico a inicios del siglo pero poco ha ido decayendo.

La competencia con el gas natural y la modificación en los patrones de consumo (uso de estufas eléctricas o microondas para cocinar) han hecho que baje la demanda de gas LP. Esto hizo que también se modifiquen las necesiades de consumo del gas LP y que los tanques ahora rindieran más tiempo antes de ser reemplazados. La gente también quiere que le abastezcan a granel (como en los tanques estacionarios) en lugar de tanques completos.

La respuesta de las gaseras fue introducir tanques más pequeños como los de 15kg, 10kg o hasta 5 kg. Estos modelos son los que comunmente se venden en otros países, como los europeos que van a la vanguardia en su producción y portabilidad.

Este tipo de tanques en Europa se venden en los supermercados como si fueran garrafones de agua. Pero aqui viene el detalle de la tecnología: Los tanques de gas LP tienen que estar presurizados ya que el contenido del gas LP dentro del tanques es líquido y por el puro cambio de temperatura y presión al salir lo convierte en gas.

Por eso, los tanques estaban construidos con acero de tal grosor que el puro tanque pesaba más que el contenido de gas. En Europa se comenzó a utilizar en un momento dado, la fibra de vidrio refozado con un compuesto de plástico. Es un especie de tejido que recubre la fibra y la hace hermética. Esto permite su portabilidad y que muchas personas puedan cargar un tanque pequeño sin problemas (como la foto de este post).

En Brasil se trató de introducir este tipo de tanques de tercera generación y el resultado no fue del todo bueno. El trato de las personas y los lugares donde se colocaba el tanque en las casas poco a poco hacia pequeñas fisuras en el tejido del compuesto de plático y dejaban escapar el gas.

Este fenómeno se presentó también en las pruebas que se realizaron en diferentes mercados latinoamericanos, entre ellos México. La rudeza con la que se tratan las cosas y más por parte de los distribuidores no permitiría que el uso de estos tanques fuera el óptimo. Ahora se piensa en utilizar un tanque de cuarta generación (aún proceso de diseño) que permita el uso rudo que le pueden dar, tanto distribuidores como usuarios a los tanques y permita su portabilidad al no ser de puro acero.

Se espera que para el próximo año México sea pionero en esta tecnología de tanques para uso rudo y que pronto abraque otros mercado de tanques presurizados como los de oxigeno, bebidas con gas (barriles) y otras aplicaciones.

A ver que tal nos va con esta tecnología.

Nigger