Diversidad de Opiniones


De verdad no puedo creer que la gente no acepte que uno pueda pensar diferente a ellos. En estas últimas elecciones se polarizaron los pensamientos y las preferencias más que hace 6 años y me cuestiono: ¿en serio creen que hay gente que busca que los gobierne un partido para que los reprima, empobrezca y manipule?

De entrada yo creo que todos queremos un México mejor, con más oportunidades, mejor nivel de vida, seguridad y bienestar en general. La cuestión está en la forma en que creemos cada uno que se puede lograr esto. Las elecciones debieron tratarse de eso precisamente, de la búsqueda de las mejores condiciones para nuestros siguientes 6 años.

Hubo muchos que vieron en la izquierda y su representante, López Obrador, como la mejor opción a remediar esos males. Hubo otros que lo vieron en Peña Nieto y la estructura del PRI, otros en el actual partido en el poder y Vázquez Mota y otros más en Quadri de la Torre y su Nueva Alianza. Pero también hubo otros (y creo que fue la mayoría) que más que ver en las propuestas de los candidatos las condiciones para un mejor México, vieron el potencial daño que podría causar la postura de ellos en el actual nivel de bienestar. Al final de cuentas, todas las opciones tienen sus pros, sus contras y es ahí donde tenemos que empezar a darnos cuenta de que, sea cual sea el motivo por el que cada uno voto, fue una expresión de la mayoría que busca un mismo fin: el bienestar de México – ya sea para mejorarlo o para preservarlo.

Y la democracias es precisamente que tengamos diferentes pensamientos, ideologías y convicciones, que se puedan expresar libremente y se respeten al final los de la mayoría. El que haya ganado un candidato determinado no quiere decir que automáticamente todo México tiene que estar de acuerdo con él y su forma de gobernar. En este punto comparto el que se le cuestione al candidato ganador sobre sus acciones mientras ejerza el poder.

Lo que no comparto es que porque no ganó el candidato al que uno apoyaba, automáticamente cuestionen la integridad, raciocino y motivación de los demás. De igual manera, tampoco comparto aquellos que porque sí ganó su candidato se puedan jactar de que ganó el sentido común y aseguren que ahora sí va a avanzar el país. Me parece increíble que hablen de tolerancia, democracia, pluralidad y justo ahora es cuando se ponen a rechazar la interacción con aquellos que no piensan como ellos. Tomen en cuenta que el objetivo de todos es el mismo: Un México mejor; pero no depende del gobierno elegido la garantía de que tengamos un México mejor, depende de nosotros mismos y de que cuidemos que se lleven las cosas apegadas a la ley. El desconocer el triunfo de el candidato solo porque no era el nuestro no es la mejor forma de lograr esto.

¿A qué viene esto ahora que ya pasaron tres semanas de las elecciones? Pues que todavía siguen pesando las repercusiones en los pensamientos de muchos. La mayoría ya no quiere discutir sobre el tema, pero muchos siguen tratando de hacer ver que la mayoría eligió mal al no votar por su candidato, específicamente por AMLO. Y porque siguen las manifestaciones que cada vez son más controladas por los de posturas más radicales. Creo que ya es hora de que dejemos de lado nuestras diferencias ideológicas y políticas y nos juntemos para construir un mejor nivel de vida para nosotros y no esperar que sea el gobierno que eligió la mayoría lo haga.

Nigger

Comentarios

La Rosy dijo…
Me gustó tu cierre y concuerdo en mucho contigo. Democracia es una palabra muy mal entendida. El "se hace lo que la mayoría diga" es una estupidez. Es un blanco o negro (¡plop!:D) muy de primaria

Una vez escuché a un abogado de derechos humanos (que por cierto, da clases a los diputados) que el gobierno verdaderamente democrático debe buscar el bien de la mayoría, siempre y cuando ese bien no dañe los intereses de una minoría.

Saludos Negro!

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