El problema del agua

Ahora con lo del cambio climático, los terremotos de Haití y la crisis global parece que hay varios temas que hemos pasado por alto o que preferimos no acordarnos… hasta que suceden. Uno de esos temas es el agua.

Y digo que suceden, porque en las últimas semanas las tormentas dejaron un problema enorme en varias ciudades del país, incluyendo zonas del oriente de la Ciudad de México. En algunas zonas, las precipitaciones dejaron saturadas las vía de desagüe y las consecuentes inundaciones por varios días. Aunado a esto, el deshielo de los volcanes impidieron las labores de restauración del sistema acuífero de esa zona.

En los estados de Michoacán y Querétaro incluso hubo varias escuelas que dejaron de dar clase ante la lluvia constante que duró hasta 2 o 3 días seguidos. Pero el problema radica en que no se puede aprovechar ese exceso de agua que cayó y el problema de abastecimiento de agua potable sigue vigente.

La disponibilidad de agua sigue en descenso y se espera que con el tiempo se vuelva crítico el tema de la escasez del agua. Según cifras de la SEMARNAT la disponibilidad de agua en 2007 fue de 4,312 metros cúbicos por habitante al año. En 2010 se espera que esa cifra sea de 4,210 m3/hab/año, es decir, un 2.37% menos en 3 años.

Y las proyecciones para los siguientes años no son nada halagüeñas: 2015 con 4,066 m3/hab/año, 2020 con 3,946 m3/hab/año, 2025 con 3,851 m3/hab/año y finalmente 2030 con 3,783 m3/hab/año que significarían una baja de 12.27% respecto a 2007. Y esto es a nivel país, pero cuando se analizan estas proyecciones en zonas hidrológico-administrativo, se tienen cifras en algunas de ellas en niveles cercanos o inferiores a 1,000 m3/hab/año. Esta condición ya se considera como grave de escasez.

A nivel gobierno se tienen contempladas diversas acciones para mitigar el desperdicio de agua y adaptarse a las nuevas condiciones y sobre todo, aprovechar y eficientar la captación de agua de sus diferentes fuentes.

Entres estas acciones se contemplan las repotenciación de hidroeléctricas, el tratamiento de aguas negras con plantas en las grandes ciudades y sobre todo, con programas de fomento en el reuso e intercambio de agua a la población en general.

Ya desde hace mucho han salido anuncios que nos invitan a cuidar el agua, pero poco caso ha hecho la población en general para dejar de usar tanta agua. Uno de los motivos es el costo, que francamente es muy accesible como para que nadie se preocupe por ahorrar, pero otro es la costumbre arraigada en cada uno de nosotros.

¿Cuántos de nosotros no dejamos el agua corriendo mientras nos rasuramos, enjabonamos, calentamos el agua u otras actividades que nada tienen que ver con la función del agua del baño en sí? o ¿cuántas veces usamos el escusado porque tiramos una pañuelo desechable o alguna basura, además de ir a cada rato?

Ya hay escusados y regaderas ahorradoras de agua y yo creo que (aunque la idea parezca descabellada para muchos) la instalación de un mingitorio que no usa agua en casas ya debería ser considerado. En Brasil incluso se ha iniciado una campaña para que la gente mee en la regadera mientras se baña.

La idea general es que se tenga la conciencia de ahorrar el agua, porque ya muchos analistas (fatalistas para mi gusto) dicen que la siguiente guerra mundial, ya no será por intereses políticos u económicos, sino por el agua. No creo que lleguemos a tanto, pero de que es un tema importante, lo es… si logramos cambiar nuestras arraigadas costumbre, quizá podamos hacer una contribución importante en el tema del agua.

Nigger