El desastre nuclear en la energía



Cuando se habla de las necesidades de consumo de energía en el mundo, nos enfocamos siempre a la generación eléctrica, pero incluso en ese rubro, se requiere de otras fuentes de energía para generarla.

Las fuentes de energía que conocemos hoy en día son: petróleo y sus derivados, biomasa, gas, carbón, nuclear y renovable. En la renovable se incluye la eólica, solar, hídricas, cinéticas, etcétera. Las primeras plantas de generación eléctrica fueros construidas a base de carbón y luego empezaron a utilizar otros combustibles. En México, por ejemplo, la mayoría de las plantas siguen usando carbón y combustóleo (derivado del petróleo) y las más nuevas han sido a base de gas natural.

Con la problemática del calentamiento global, se ha buscado desincentivar el uso de aquellas fuentes de energía que producen mayor cantidad de dióxido de carbono, como son los derivados del petróleo y el carbón, al tiempo de promover aquellas que no producen CO2, principalmente las renovables.

El caso de la biomasa y el gas, ya sea natural o licuado de petróleo, sus emisiones en CO2 son menores y se les considera un paso intermedio hacia la generación con cero emisiones de la electricidad.

El caso curioso es el nuclear. La generación nuclear es limpia, e incluso ayuda a mitigar emisiones de gases de efecto invernadero, pero no se promueve su uso debido a que se requiere de material radioactivo para funcionar. El material radioactivo es producido solo por unas pocas naciones en el mundo y tienen un control muy estricto para su uso, ya que el mismo material sirve para fabricar bombas.

Muchas naciones en conflicto siempre están a la búsqueda de material radioactivo para obtener fuerza militar y el nivel de devastación que producen las bombas nucleares mantienen alerta al mundo en general sobre el uso de ellas. De promover plantas nucleares, se tendrían que redoblar los esfuerzos para controlar el material radioactivo en uso.

Estados Unidos es el mayor usuario de energía nuclear seguido por Francia, aunque Francia abarca la mayor cantidad en relación a su población. El tercer país con mayor número de plantas nucleares es justamente Japón. De ahí la importancia del desastre que significa para el futuro de esta tecnología como una alternativa de energía en el futuro.

Sin embargo, la energía nuclear es quizá la mejor solución antes las crecientes necesidades de energía a nivel mundial. Las tendencias de las tecnologías, tales como vehículos, electrodomésticos o vivienda, tienen cada más dependencia de la electricidad promoviendo su uso como tecnología limpia o de cero emisiones. Esto deja todo la responsabilidad de emisiones a la generación eléctrica.

Y como ya dijimos al principio, la generación eléctrica con cero emisiones solo proviene de las fuentes de energía renovable y la nuclear. Los recursos para instalar plantas de energía nuclear respecto a las renovables de hoy en día, y considerando su factor de generación en MW, es por mucho más viable. Sin embargo, lo mismo es el riesgo de una contingencia.

En Chernóbil el 16 de abril de 1986 se dio una explosión en uno de los reactores provocando la muerte inmediata de 31 personas, pero la radiactividad producida se detectó hasta en 13 países de Europa Oriental y Central. Se hicieron esfuerzos para contener y limpiar la radioactividad en la mayor medida y actualmente un radio alrededor de 30 km de la planta sigue aislada.

Incluso ese nivel de radioactividad fue plasmado en el juego de computadora SimCity en la que si construías una planta nuclear y explotaba, dejaba terreno inservible para construir lo que fuera hasta por un lapso de 50 años o algo así.

Las explosiones de los reactores en planta de Japón pueden provocar niveles de radiación en todo Japón y sus países vecino de Corea del Norte y Sur, Rusia y China. Japón podría volver a vivir las consecuencias en su población como en la segunda guerra mundial y la bomba atómica, pero ahora sin poder controlar directamente la población afectada.

Los requerimientos de materiales para contener los niveles de radiación a nivel mundial ya están afectando los mercados de valores y los precios de los metales. En términos económicos El pool atómico mundial (seguro mundial de plantas atómicas y nucleares) tendrá que exigir una revisión de las plantas aseguradas.

Con este incidente en Japón, ya sería apenas su segundo siniestro y ahora no por cuestiones de seguridad y control como el de Chernóbil, sino por ubicación. Se vendrá una demanda de nuevas medidas de seguridad. Alemania ya anunció una revisión en sus instalaciones nucleares, México también ya está considerando la vialidad de seguir con las construcción de plantas como la de Laguna Verde. Francia, quizá los líderes en energía nuclear dicen que sus plantas son seguras y no requieren revisión.

Ahora vendrá nuevas modificaciones de seguridad contra sismos y las que se ubiquen zonas cercanas a las playas también tendrán que hacerle modificaciones a sus instalaciones por los riesgos de tsunamis. No se sabe cuánto costará esto ni específicamente qué se tenga que hacer hasta que se controle la situación en Japón, ya que hay riesgo de más explosiones en los reactores restantes. Por ahora estaremos al pendiente.

Nigger

Comentarios

Héctor dijo…
Pensé que había quedado claro lo de "mitigar" en el contexto de la generación eléctrica a través de plantas nucleares....pero tristemente no fue el caso...muy mal Negro.
Nigger dijo…
Esto lo escribí antes de la plática que tuvimos...

Entradas más populares de este blog

¿Quién ha sido el mejor piloto de la historia del automovilismo?

Semifinales de la Euro

Por favor retírense