Iron Maiden 10 - Organizadores 0

La tan ansiada espera por la llegada de Iron Maiden llegó a su fin y varios cuates y yo ya estábamos listos para el magno concierto desde 3 horas antes de que iniciara. Nos habían dicho que la cola de la gente formada había iniciado desde las 5 de la mañana y que ya estaba bastante nutrida.

Llegando, vimos un cola inmensa, y nada más era una. La gente de todas las secciones solo tendría un acceso y ahí fue cuando vimos que valía gorro la organización del evento. Una sola puerta para más de 30 mil individuos que íbamos a secciones de cancha, gradas o gallola. Pero lo malo no fue la unicola, sino que los brillantes organizadores se les ocurrió abrir hasta casi las 7:30, cuando el concierto estaba programado para las 8:30 y ya nos habían dicho que Laura Harris (la abridora) iba a tocar a partir de las 8 como en Guadalajara.

Cuando por fin ingresamos al interior de las instalaciones, para volver a hacer otra cola afuera del foro (ahora sí por secciones), la gente de afuera ya se metía sin ningún orden ni fila. La forma en que llevábamos los boletos se nota que les era poco conocida porque para verificar su autenticidad, nos hicieron perder más tiempo todavía.

Una vez en que ingresamos adentro de la Arena Monterrey, bajando por las gradas a la sección de cancha, nos quitaron nuestro boletos para darnos acceso y a todos los que estábamos en esa sección les hicieron lo mismo. ¿Con qué objeto hicieron eso? Yo sigo con la duda.

En zona de la cancha, no había baños, entonces si uno quería al baño, tenía que pedirles a los organizadores un boleto de vuelta para poder regresar a la cancha una vez terminado de hacer lo que uno tienen que hacer. Lo malo de ese sistema taaaan tonto, es que se le colaron cualquier cantidad de gente de la sección de gradas a la cancha, además de la molestia de tener que enseñar el boletito a cuanto monito de staff te lo pidiera para volver a llegar a la cancha.

Vaya, hasta los repartidores de chelas y chescos se tardaban eternidades para servirte algo y uno no podía ir hasta donde los servían para pagar directamente el suyo, tenía que ser a través de los repartidores.

Toda esa molestia que generó la organización se diluyó con la actuación de Maiden. Justo cuando iniciaron me logré colar hasta más o menos tercera fila (la sección de cancha era "general" y los que estuvieron formados desde la mañana eran los que lograron acaparar esa parte) y con Aces High, la licuadora de gente no se hizo esperar. En los movimientos de la gente recorría como 5 metros de lado a lado sin perder mi lugar y a veces, sin tocar el piso.

Terminando Two Minutes to Midnight tuve que salirme de ese mundo gente ya todo sudado, cansado y torteado porque no creo que hubiera resistido más rolas así. Eso sí, vi a Murray, Harris, Dickinson y Smith a menos de 5 metros en ese lapso de canciones. El momento cumbre para mí, fue cuando tocaron The Rime of the Ancient Mariner, que es mi canción favorita de Maiden y que pensé que jamás escucharía en vivo. Lo extraño del asunto, es que casi nadie se la sabía... sí la habían escuchado, pero poca gente la cantó porque desconocían la letra.

El escenario cambiaba constantemente, a manera de cómo decoraban los escenarios en sus diferentes giras, predominando el de la gira del Powerslave. El Eddie que salió a escenario fue el Somewhere in time, y Bruno se caracterizó en la rola de Powerslave con una máscara prehispánica, además de la ya clásica, pero siempre chida rola de The Tooper, con su saco rojo y su bandera del Reino Unido.

El concierto había iniciado a eso de las 9 de la noche y aunque no chequé a qué hora acabó, yo le calculo que fue por ahí de las 11:15 aproximadamente... contando con el encore programado y uno que les salió a medio concierto que aprovechó la gente para corear el nombre de Maiden y que al parecer dejó impresionado a Bruce Dickinson, mientras los demás veían que seguía. Por su puesto, anunciaron que regresarán a México en su siguiente gira.

De las cosas curiosas que me pasaron, había un monito que, como tantos otros) estaban grabado y tomando fotos con su celular, pero justo encima de mi cabeza, por lo que cuando levantaba las manos, le tapaba su "grabación", entonces, al muy idiota se le ocurrió poner el celular un poco más adelante sobre mi cabeza, aprovechando que soy bajito, pero en la siguiente ocasión que levanté las manos, el celular fue a dar unos metros adelante volando por los aires.

De los dos conciertos que van del año, este se llevó las palmas y dudo que haya otro que le quite ese honor, porque en definitiva estuvo, como dicen los regio: con madre.

En resumen, y como título de este post: Iron Maiden sacó un 10 y los organizadores regiomontanos un 0... se nota que solo sirven para dos cosas: Para nada y para lo mismo.

Nigger