Siguen las críticas - Gorky Park
Apenas vi una película de esas que tenía ganas de ver desde hace mucho y no se había presentado la oportunidad. Afortunadamente mi hermano se la compró y me la prestó: Gorky Park
Gorky Park es, originalmente, una novela de Martin Cruz Smith, novela que hace ya un buen tiempo que leí y que había gustado mucho y de ahí mi interés por ver la película. Una de las mejores novelas de intriga policiaca y que tiene su secuela en el libro de Estrella Polar. La película en sí, es la mejor adaptación al cine que he visto de una novela... prácticamente la novela fue el guión, ya que no tuvieron que hacerle muchas modificaciones para plasmarla en la pantalla y quedé muy complacido con la película.
Cuando mi hermano me la prestó, pensé que si la película era la mitad de buena e interesante que el libro, ya iba de gane. Mucha fue mi sorpresa cuando vi que el único cambio significativo es que el final de la trama terminá en Estocolmo en la película, cuando en la novela terminá en Nueva York, si mal no recuerdo.
La película es estelarizada por William Hurt y Lee Marvin, además de Joanna Pacula, una actriz rusa que está preciosa; la trama empieza cuando tres cadáveres sin rostro ni huellas dactilares son encontrados en el parque Gorky y a partir de minúsculas pistas, se van develando los motivos, asesinos, tratos y cómplices de este multicídio que dejan a cualquier capítulo de CSI corto.
El dilema del detective de la policía rusa, Arkady Renko, entre seguir la investigación a la vez de poner a salvo su vida que ha sido comprometida por sus superiores, en un marco de la Rusia de la Unión de Repúblicas Soviéticas Socialistas, es bien llevada y no se "sacan de la manga" explicaciones o soluciones impresionantes.
El tráfico de animales para su explotación de parte del norteaméricano Osbourne y el hecho de que Arkady le muestre de frente la evidencia y no pueda ejercer su autoridad le da un toque de realismo como el que sufrimos ante el abuso de autoridad.
Mi calificación para esta película es de 10, ya que, a pesar de no ser de 1983, los productores Gene Kirkwood y Howard W Koch y el director Michael Apted hicieron un trabajo impecable al plasmar la escencia de la novela sin grandes presupuestos, pero con las locaciones perfectas para la realización de esta película.
Gorky Park es, originalmente, una novela de Martin Cruz Smith, novela que hace ya un buen tiempo que leí y que había gustado mucho y de ahí mi interés por ver la película. Una de las mejores novelas de intriga policiaca y que tiene su secuela en el libro de Estrella Polar. La película en sí, es la mejor adaptación al cine que he visto de una novela... prácticamente la novela fue el guión, ya que no tuvieron que hacerle muchas modificaciones para plasmarla en la pantalla y quedé muy complacido con la película.
Cuando mi hermano me la prestó, pensé que si la película era la mitad de buena e interesante que el libro, ya iba de gane. Mucha fue mi sorpresa cuando vi que el único cambio significativo es que el final de la trama terminá en Estocolmo en la película, cuando en la novela terminá en Nueva York, si mal no recuerdo.
La película es estelarizada por William Hurt y Lee Marvin, además de Joanna Pacula, una actriz rusa que está preciosa; la trama empieza cuando tres cadáveres sin rostro ni huellas dactilares son encontrados en el parque Gorky y a partir de minúsculas pistas, se van develando los motivos, asesinos, tratos y cómplices de este multicídio que dejan a cualquier capítulo de CSI corto.
El dilema del detective de la policía rusa, Arkady Renko, entre seguir la investigación a la vez de poner a salvo su vida que ha sido comprometida por sus superiores, en un marco de la Rusia de la Unión de Repúblicas Soviéticas Socialistas, es bien llevada y no se "sacan de la manga" explicaciones o soluciones impresionantes.
El tráfico de animales para su explotación de parte del norteaméricano Osbourne y el hecho de que Arkady le muestre de frente la evidencia y no pueda ejercer su autoridad le da un toque de realismo como el que sufrimos ante el abuso de autoridad.
Mi calificación para esta película es de 10, ya que, a pesar de no ser de 1983, los productores Gene Kirkwood y Howard W Koch y el director Michael Apted hicieron un trabajo impecable al plasmar la escencia de la novela sin grandes presupuestos, pero con las locaciones perfectas para la realización de esta película.
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