Frustrante semana - update

Hoy voy a usar el blog como desahogo personal, cosa que no hago seguido...

Y es que esta semana no ha sido la mía pero espero que mejore esta noche (mejoro entre las 6pm y las 10 pm, pero poco). Todo inició el lunes cuando tuve problemas con mi lap que se trabó otra vez con un error del Kernel 32 y tuve reiniciarla en modo a prueba de fallos para restaurar los sectores dañados. En noche de ese lunes al regresar de la célula por la colonia Portales me encontré con que el auto de mi papá (el mío no circula el lunes) no arrancaba, ni siquiera daba marcha y entre Toño, Raúl e Isabel me ayudaron a pasarle corriente... resulta que me ví bien bruto y había dejado las luces encendidas y eso había bajado la batería del auto. Eso fue como a la 1 de la madrugada.

El martes en la mañana fue a trabajar y me dieron instrucciones de sitios para obtener datos de precios de combustibles en Alemania y no logré en 2 horas conseguir la información que requería. A mediodía fui al banco a pagar mis tenencias para poder verificar mi auto y ya en el verificentro no me pidieron los pagos (lo que no me dio gusto, ya que pude haberme ahorrado otro rato ese pago) y por el contrario, como ley de murphy, me tocó la fila más larga y además la más lenta. Tarde más de una hora en que me tocara turno de verificar y al final... no pasó. Claro que no lo había afinado ni nada, pero hasta esta verificación siempre había pasado (con las 2) pero se me acabó esa suerte.

Para colmo de males ese día, regresando del verificentro, me tocaron una exepcional cantidad de gente estúpida al volante lo que aumentó mi enojo y como cereza del pastel, se me descompuso el claxón. Mi frustración era muy grande y cuando intenté regresar a la oficina, que se me olvidan las llaves y como no hay nadie en ella en las tardes, me tuve que regresar a mi casa.

Afortunadamente en la noche, el squash y los amigos Toño, Tatanka, Lemus y Rodrigo me hicieron olvidar un poco ese detalle, pero el miércoles volvieron las andadas... llevé mi auto a que lo afinaran y verificaran, pero como era el penúltimo día para hacerlo, me la hicieron de jamón en 3 talleres que me querian cobrar hasta 2000 pesos todo, al final encontré uno que me cobró casi la mitad y me dijo que me lo entregaba como a la 1. Al final, el auto me fue entregado a las 7 de la noche que porque (obvio) había mucha cola en los verificentros.

En la noche fui a una reunión otra vez en la Portales y de regreso, que se me prende el foco del alternador y en viaducto que se me apaga el auto como si estuviera descarburado... lo encendí pero no tenía potencia hasta que después de un rato por fín arrancó bien y logré avanzar hasta la división del viaducto Miguel Alemán con Río Becerra y otra vez se me apagó pero ahora sí ya no quiso encender. Le revisé todos los cables habidos y por haber y nada, hasta que se acabó la batería de tanto intentar arrancarlo. Una alma caritativa me ayudó a salir de los carriles centrales y mi hermano Carlos fue en mi auxilio y eso que ya era casi la 1 de la madrugada. Le pasó batería y ya arrancó, pero ahora le faltaba gasolina, que seguramente se la acabaron en el verificentro porque debía tener suficiente (mi medidor no sirve) y total arrancó y logré llevar mi auto hasta mi casa sin mayores contratiempos.

Además se me había agudizado un viejo problema que tiraba aceite de dirección, pero esta semana se agudizó al grado de que ya me eché casi 2 litros de ese aceite para poder maniobrar sin esfuerzo. Ahora tengo que llevarlo a arreglar de eso y a que me laven el motor en donde me hicieron la afinación, porque me quedaron debiendo ese servicio.

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Bueno, el jueves en la noche, para seguir con mi racha, fui a reunirme con mis amigos en el acostumbrado café de los jueves y ya estaban ahí los mismos amigos, Tatanka, Lemus y Rodrigo y después llegó Christian y me informó que había dejado las luces prendidas. Fui a mi auto y afortunadamente todavía encendía y no tuve mayores problemas con eso, pero el viernes regresando de mi oficina a mi casa a comer, que se me vuelve a apagar mi auto.

La gasolina otra vez, pensé, y llegué a mi casa a comer y después fui con mi hermano Gabriel a ponerle gasolina con un bote. Le puse la gasolina y no arrancó por lo que tuve que irme al trabajo en micro y el tramo del micro a mi oficina (como unos 500 metros) fue justo cuando cayó la lluvia y llegué empapado a trabajar.

En la noche, fui con el auto de mi papá a ver si otra vez con corriente arrancaba y nada. Pasé al taller haber si de casualidad todavía había algún mecánico y no, pero lo malo fue que el coche de mi papá no arrancó y tuvieron que pasarle batería.

El sábado temprano iba a ir con el mecánico y resultó que el auto de mi papá otra vez no arrancó y me tuve que ir a pie con el mecánico. Ya con el mecánico me arregló un seguro que hace pasar la gasolina del tanque al inyector y que está en la cajuela, osea que yo nunca iba a dar con ese dichoso seguro.

El auto de mi papá, además teníá una terminal de la bateríá´muy sucia y que estaba impidiendo que cargara y por supuesto de generar la chispa para arrancar. Al final, parece que todo ya quedó arreglado y lo único que puede pasar para mañana es que el daño a la bateria provoque que ya no funcione bien y le siga dando problemas, pero no creo que sea el caso.

Ahora a esperar el martes para desquitarme con la pelotita de squash de lo que pasó desde el miércoles hasta hoy.

Nigger